Para los más pequeños de la casa, diseñadas de manera ergonómica son gruesas y pequeñas para facilitar al niño su agarre, se deslizan de manera suave por el papel y son muy fáciles de sacar punta. Otra de las ventaja que las hace ideales para los niños es que no huelen, no manchan, y no rompen al caerse al suelo. Recomendadas para uso escolar y manualidades.